WALTER RÍOS
Ante la baja del mandatario salteño, Uñac acordó con Nación y sus pares una cumbre para buscar consensos.
El Acuerdo Federal Minero entre las provincias y la Nación parecía ingresar en un callejón sin salida. Con escaso tiempo de anticipación, la administración macrista les había comunicado a los gobernadores que el lunes se llevaba a cabo su firma. El salteño Juan Manuel Urtubey se cortó solo y anunció que no iba a ser parte del pacto porque dice que aumentará la carga tributaria a las empresas, y el Ejecutivo decidió postergar el encuentro, según publicaciones nacionales.
Pero Sergio Uñac se comunicó con todos sus pares, con el ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren, y el secretario del área, Daniel Meilán, y fijaron que mañana se realice la reunión en Buenos Aires, a las 14, pero para generar los consensos en los puntos en los que existan diferencias. Según trascendió, la cumbre en la que todos estamparán el gancho se realizaría el 13 de este mes.
El acuerdo contempla iniciativas como el hecho de mejorar la gestión y el control ambiental, punto por el que se verificará periódicamente la calidad del agua, aire y suelo en los establecimientos mineros, y desarrollar la infraestructura y poder integrar a la minería con el resto de las actividades productivas.
El Acuerdo Minero apunta a fijar reglas, como la no modificación del régimen de regalías, la institucionalización de los fideicomisos y las facultades y límites de las compañías públicas, que sirvan de señales para que las empresas inviertan en el país. San Juan no es una provincia más, ya que cuenta con las minas Veladero, Gualcamayo y Casposo y tiene otras tantas en carpeta.
Por su parte, Uñac viene cultivando un perfil dialoguista y actuando de nexo con sus pares gobernadores en temas que los involucra a todos, como la restitución del 15 por ciento que la Nación retenía de la coparticipación para fondear a la Anses. No sólo eso, sino que es uno de los que tiene llegada y una buena relación institucional con la gestión macrista, sin dejar de remarcar que pertenecen a partidos distintos y que las diferencias políticas las dirimirán en las urnas.
Con ese peso, el sanjuanino se puso en contacto este fin de semana con las autoridades nacionales en minería para promover la reunión, sobre la que recibió el OK, señaló el ministro de Minería, Alberto Hensel. El funcionario agregó que Uñac también se comunicó con el resto de los mandatarios, incluido Urtubey, y que él se contactó con los ministros provinciales en la materia para “buscar los consensos para la firma del acuerdo”.
25 Mil millones de dólares planean invertir en el país las mineras hasta 2021. Además, calculan sumar 40 mil nuevos puestos de trabajo a los ya existentes.
El macrismo viene apuntando al pacto minero desde el año pasado, con el objetivo de “no dejar de perder las oportunidades de inversión en el sector”, había dicho el ministro de Energía y Minería de la Nación, Juan José Aranguren. Durante un año, los representantes de las provincias, que se reúnen en el Consejo Federal de Minería (Cofemin), elaboraron el acuerdo, pero el mismo quedó sujeto a la firma de los gobernadores, que son los responsables políticos y territoriales. La crítica más importante que hay sobre el tratado es el peso de la carga tributaria total de los futuros proyectos, que hace que el país no sea competitivo en comparación con otras regiones.
Según fuentes del sector, la mayor presión viene justamente de la Nación, al punto de que lo graficaron de la siguiente manera: de ocho pesos en impuestos que genera la minería, siete van a parar a las arcas de la administración central. Urtubey dijo en medios nacionales que el pacto “abre la puerta a un crecimiento de la presión tributaria”.
El ministro de Minería, Alberto Hensel, recorrió el viernes la mina Veladero para inspeccionar cómo avanzan los trabajos de remodelación. El funcionario señaló que desde Barrick le informaron que las tareas estarán finalizadas dentro de 10 días. En ese sentido, se mostró optimista al ver que la compañía “está cumpliendo con lo que el Gobierno le ha ordenado”.
Sobre la mina pesa una suspensión en el valle de lixiviación (la zona donde se separa el oro de la roca) luego de que se produjera un nuevo incidente, el tercero en un año y medio. El de marzo último se produjo por el desacople de tres cañerías que transportaban solución rica (oro y plata líquida con cianuro), la cual traspasó la berma del valle, aunque luego fue reencauzada. Pese al avance de los trabajos, el ministro no arriesgó una fecha para levantar el freno en la mina hasta tanto hagan los controles, disparen el procedimiento administrativo y notifiquen a la Justicia, que también ordenó la suspensión a través de una medida cautelar.
