En medio de los contenidos digitales y servicios de streaming como Netflix, los viejos VHS quedaron relegados a ser una curiosidad para coleccionistas, con el cierre de los locales de alquiler de películas. En medio de todo esto, la última fábrica de videograbadoras acaba de anunciar el cese de su producción.
onocida por ser el único fabricante conocido en mantener su producción, la firma japonesa Funai Corporation anunció en un comunicado el cese de su producción. ¿Los motivos? La dificultad para conseguir las partes necesarias para producir una videocasetera.
En el último año, Funai vendió unas 750 mil unidades en todo el mundo, una cifra menor respecto a otras épocas. En un recorrido histórico de esta tecnología, la firma Ampex Electric fue la responsable de crear el primer equipo en 1956, que costaban unos 50 mil dólares, según el reporte publicado por The New York Times.
La videograbadora tuvo su época de oro durante la década del 80, luego de una disputa entre fabricantes japoneses que trataban de imponer el formato estándar en el mercado. Por un lado estaba Betamax de Sony, y del otro rincón se encontraba VHS impulsado por Matsushita, que logró establecerse como norma de facto.
Luego, los reproductores de VHS comenzaron a ser desplazados por los DVD a mediados de la década del 90, y luego el formato físico evolucionó en los discos Blu-ray, para luego ser reemplazado por el público por servicios de transmisión on line como Netflix.