Desarrollar soluciones creativas y nuevas aplicaciones que respondan a las necesidades de las industrias del país, ese fue el objetivo de la construcción del Centro de Innovación de 3M en Santiago que en agosto cumplió un año y que ya ha recibido más de 10 mil visitas.

Algunos de los desarrollos destacados durante el primer año son el mejoramiento en elementos de protección personal, por ejemplo en el área de Protección de Caídas, además de trabajos en conjuntos con universidades como el Centro de Innovación de la Universidad Católica y la Universidad del Bío Bío.

“Estamos muy contentos con la recepción que ha tenido nuestro Centro de Innovación. Generamos interacción con nuestros clientes desarrollando aplicaciones y nuevas soluciones para problemas no resueltos de la industria nacional.

Además el Centro se ha transformado en un punto de colaboración entre emprendedores”, señaló Hernán Conejeros, gerente Técnico de 3M Chile.

El edificio cuenta con 10 laboratorios para demostración, capacitación y desarrollo de aplicaciones, donde profesionales especializados trabajan en tecnologías para una amplia variedad de industrias productivas como minería, vitivinícola, forestal, salmonera, alimentos y bebidas, construcción, transporte consumo, dental y salud.

Durante el primer año de funcionamiento del Centro de Innovación la División de Seguridad Industrial realizó diversas charlas y entrenamientos relacionados con las nuevas tecnologías e innovaciones en materia de seguridad dentro de su laboratorio.

La utilización de una cabina para simular situaciones de exposición a alto niveles de ruido y de otra cabina que permite simular la exposición a material particulado fino, ha permitido que las empresas y especialistas puedan comprobar “in situ” el desempeño de estas innovaciones.

Protección auditiva que capta la vibración de la voz al interior del conducto auditivo para poder comunicarse a través de los oídos cuando se usan sistemas de radio portátil, o equipos motorizados de protección respiratoria para ser utilizados en ambientes altamente contaminados, han sido algunas de las demostraciones que han llamado la atención de más de 800 personas capacitadas durante este primer año, pertenecientes a las más importantes empresas del país, instituciones de gobierno, mutualidades e establecimientos de educación superior, entre otras.

Para el segundo año del centro, los objetivos son continuar contribuyendo al desarrollo de industrias que son clave en Chile como minería, salud, forestal, alimentos y bebidas, y construcción antisísmica, y seguir colaborando con la experiencia para buscar las mejores soluciones.