¿Cuáles son los cambios que se plantean a partir de esta búsqueda de reunir cámaras mineras en el marco del nuevo contexto nacional?

-Es un proceso de cambio para todos, en el país, en la cámara y de perspectivas de la industria minera argentina para el futuro. El primer gran cambio que estamos tratando de desarrollar en la cámara tiene que ver con la federalización, de incluir a todas las cámaras provinciales en la Cámara argentina de empresarios mineros y también a los proveedores.

Con ello queremos que toda la industria tenga la representatividad federal y a partir de eso poder interactuar con este nuevo Gobierno, por lo tanto el desafío que tenemos, es muy grande.

¿Cuáles serían los principales objetivos luego de que cambiaran las condiciones? ¿Hay posibilidades de inversiones, cómo se ve ese escenario?

-Es muy positivo, hemos estado acompañando al Gobierno nacional, a los Gobiernos provinciales en la última Feria Internacional de Toronto, Pdac, y la verdad es que volvimos con mucha satisfacción de la expectativa de nivel internacional que hay para Argentina.

Sin embargo creemos que este es un año para "poner la casa en orden", para avanzar en la construcción de esta nueva realidad, nueva cámara y también de organizarse desde el Estado para recibir esa nueva inversión, que creemos que a partir del año puede empezar a generar nuevos proyectos. Dentro de los desafíos está reactivar los proyectos que estaban dormidos en Argentina y que hoy se pueden reactivar.

¿Cuáles son esos proyectos por reactivar?

-Por ejemplo se pueden reactivar proyectos como El Pachón (yacimiento de cobre y molibdeno emplazado en la provincia de San Juan), otros como Agua Rica (proyecto minero ubicado cerca de Andalgalá, Catamarca), Chinchillas de Jujuy y otros en la Patagonia.

Otros desafíos que tenemos tienen que ver con aquellas provincias donde todavía no se puede realizar actividades metalíferas y que sí hay proyectos importantes para el desarrollo del país.

¿En este nuevo escenario, se conversa con el Gobierno? Porque hay provincias en las que se está cerrando la actividad como en Mendoza, en otras se habla de resguardar los recursos y en otras se cuestiona mucho por el caso del derrame en San Juan, por ejemplo...

-Creo que tenemos que profundizar el diálogo, recuperar la confianza y se recupera a través del diálogo institucional, y creo que a partir de la nueva relación que la cámara ha emprendido con el Gobierno nacional, con las provincias, con los distintos actores, en una mesa de diálogo social, tenemos que empezar a corregir esas situaciones.

Tenemos un Gobierno nacional que impulsó la minería, está dentro de sus ejes de desarrollo nacional, hay interés internacional, las cámaras están impulsando nuevas inversiones. Al mismo tiempo tenemos provincias donde no podemos desarrollar la industria y grupos que están tratando de que la minería no llegue al país.

Esto requiere que nos pongamos de acuerdo y el gobernador (de Jujuy, Gerardo Morales) lo decía, tenemos que empezar a ver en aquellos lugares donde se puede y donde no se puede, y por lo menos tener reglas claras de juego, que podemos trabajar en el Estado de derecho, que es lo que necesita la inversión minera que es a largo plazo.

¿En cuanto a desarrollo de proveedores, se ha trabajado algo en ello?

-Ahora estamos con los grupos de proveedores y las cámaras provinciales de proveedores para generar una nueva representatividad de proveedores para ser insertados en la Caem, para que también tengan una representación federal. Creo que a partir de ese espacio vamos a poder trabajar ese desarrollo de los proveedores, y esas normativas que tienen que impactar tanto al sector minero como a las industrias.

-¿Se abordó si se va a continuar con este modelo que se ha incorporado de formar empresas mixtas como en el caso de Jemse en Jujuy y otras en el país? ¿Qué visión tiene de esto?

-Creo que el eje fundamental para la toma de decisiones en ese sentido es el Cofemin (Consejo Federal Minero) y a partir de la reactivación de éste creo que son decisiones que mediante el Estado central y provincias se tienen que tomar, para saber a dónde se va con ese tipo de situaciones. Lo que requerimos del Estado es que nos defina esas reglas de juego a largo plazo.