Esto se explica por las diferencias entre los Pagos Provisionales Mensuales (PPM) y los resultados reales de las empresas en años en que el precio del cobre ha caído de forma importante. Ligados al Estado señalan que esto se explicaría por las dificultades de caja que enfrenta el fisco.
Unos US$ 1.000 millones estaría reteniendo el Servicio de Impuestos Internos (SII) a las mineras privadas, afirma El Mercurio
Según conocedores del tema, este monto se compone de unos US$ 300 millones que se habrían retenido en 2014 y unos US$ 700 millones del año pasado. La cifra no incluye a Codelco. Fuentes de la industria advierten que el Estado estaría obstaculizando la devolución de este dinero por medio de diversos instrumentos, aunque sin mucha explicación.
¿Cómo se habría llegado a un monto tan alto? Por los Pagos Provisionales Mensuales (PPM). Todos los contribuyentes -en este caso, tanto las compañías mineras como las de otros sectores- deben planificar sus impuestos a lo largo del año en función de una estimación de renta anual. “Los PPM son pagos que se deben efectuar como una provisión contra los impuestos anuales que se determinan a fin del año en que se producen las rentas, y que corresponde pagar hasta el 30 de abril del año siguiente”, explica el sitio web del SII.
El objetivo es evitar que las empresas tengan que hacer desembolsos fuertes solo una vez al año, explican las fuentes.
El problema es que la minería en los últimos años ha enfrentado importantes variaciones en el precio del cobre, y, por ende, sus ingresos reales han exhibido una brecha relevante en relación con sus estimaciones. En 2014, el precio promedio del cobre fue de US$ 3,11 por libra, mientras que en 2015 fue de US$ 2,49 por libra. En lo que va de este año, el valor del metal promedia US$ 2,14 por libra.
Fuentes ligadas al SII explican que es recurrente que ocurran estas retenciones de devolución de impuestos cuando el fisco está con muchas dificultades de caja.
Si bien los contribuyentes cuentan con una serie de acciones legales que pueden utilizar contra el SII para que se les devuelvan los montos adeudados -como los recursos de protección-, no es tan común que grandes empresas opten por esta vía, dado que por lo general no quieren tener conflictos con el servicio.
Pero ¿puede el Estado retener la devolución de impuestos acusando un problema de caja? No, dicen cercanos al organismo. Sin embargo, muchas veces optan por informar que van a hacer un proceso de fiscalización a la compañía, y con ello detienen la devolución hasta que finalice ese proceso.
Fuentes de mercado señalan, no obstante, que estas compañías son permanentemente fiscalizadas por una serie de organismos, por lo que esto sería una mera justificación para demorar la devolución de impuestos.
Consultado el SII, comentan que si existieran montos pendientes de devolución para cualquier contribuyente, se debería a los efectos de procedimientos generales de fiscalización, que no guardan relación con las dificultades de caja. Advierten que el Consejo Minero ha solicitado reuniones con la entidad para tratar el tema, lo que está actualmente en curso.
En la industria minera hay molestia, dado que esto habría ocurrido por dos años consecutivos y sin justificaciones importantes. De hecho, fuentes del sector comentan que hasta donde ellos saben, son el único sector económico que enfrenta este problema.
Para nadie es novedad que el fisco tiene sus finanzas estrechas. Solo el ajuste por US$ 540 millones en el gasto público para este año que anunció en marzo el Ministerio de Hacienda lo demuestra. La medida implica que todo el gobierno, con excepción del Ministerio de Salud, debe apretarse el cinturón este año con el objetivo de mantener la sanidad de las finanzas públicas, en un contexto de debilidad económica y caída del precio del cobre. El ajuste fiscal anunciado por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, equivale al 0,25% del Producto Interno Bruto (PIB), y es el 1% del gasto presupuestario, pero como está centrado en el gobierno, no afecta los recursos del Congreso ni los del Poder Judicial.
Al igual que el fisco, la minería a nivel mundial y local enfrenta momentos complicados.
Solo en 2015 el precio del cobre cayó 26%, pero aún así promedió US$ 2,49 por libra. Este año los pronósticos son más negativos para el metal que más recursos le aporta al fisco.
Esto explica que las mineras estén hoy enfocadas en preservar la caja, tal como lo han reconocido tanto Codelco como Antofagasta Minerals, del grupo Luksic. De hecho, la estatal ya ha dicho que durante este quinquenio busca disminuir las exigencias de la caja del orden de US$ 6 mil millones, lo que impactará la producción de cobre y en el ritmo de las inversiones. La minera privada también ha optado por la prudencia.
Los precios del cobre, si bien son fundamentales, no son lo único que tiene a la industria complicada. La caída permanente en las leyes de mineral -tonelada de cobre extraído por roca removida- producto de los yacimientos más viejos, la escasez de agua, el precio de la energía, y el alto costo de la fuerza laboral por sus altas remuneraciones y su baja productividad, también impactan la actividad. A esto se suman una serie de cambios normativos que la afectan.
26%
cayó el precio del cobre durante 2015 , y terminó el año promediando US$ 2,49 por libra, mientras en 2014 el promedio anual fue de US$ 3,11 por libra. Para este año también se espera una caída importante. En lo que va de 2016, el metal promedia US$ 2,14 por libra.
40.700
trabajadores de la minería perdieron sus empleos en los últimos 12 meses, considerando las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) para el trimestre móvil diciembre 2015-febrero 2016.
US$ 540 millones
es el recorte al presupuesto para este año que anunció Hacienda en marzo, con el objetivo de mantener sanas las finanzas públicas en un contexto de debilidad económica y de una drástica caída del precio del cobre, el metal que más recursos le entrega al Estado.
Una moderada alza mostraron Programas de Empleo con Apoyo Fiscal de Coyuntura Económica, conocidos como “empleos de emergencia”, en el primer trimestre del año. En comparación con el mismo período del año pasado, subieron 1,8%, pasando de 25.978 cupos a 26.460 puestos, informó la Dipres. Son programas de empleo Conaf y de inversión en la comunidad.
