La Comunidad del Pueblo Diaguita de Andalgalá se reunió en asamblea para "tomar medidas ante el avasallamiento" que sienten en sus tierras por las exploraciones mineras en el departamento.
Consideran que las autoridades provinciales deberían haber consultado a los 18 caciques de la comunidad cuando decidieron intervenir en zonas como Minas Capillitas y Cerro Atajo. Advierten que las comunidades originarias, sobre todo las reconocidas por el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), deben proteger el suelo donde habitaron sus ancestros como los sitios y zonas arqueológicas aún no descubiertas.
Tras el encuentro los integrantes firmaron un documento donde plasman su malestar y anticipan que harán una presentación formal para repudiar la falta de consulta, en el Consejo Nacional Consultivo de originarios liderada por Qom Feliz Díaz.
Luis Alberto Castro, cacique de la región centro de Andalgalá, detalló que están cansados de la falta de respeto por quienes ingresan a las tierras protegidas por ley.
"Las empresas entran y hacen pedazos todo lo que encuentran. Los empresarios quieren explotar y contaminar los pueblos. Llevan políticas engañosas a la gente, los engañan y dejarán contaminada el agua, y a nadie le interesa la gente. Los caciques y la gente que habita en los pueblos no tienen siquiera los estudios de impacto ambiental aprobados”, consideró.
A su vez, agregó que durante la asamblea consensuaron que están de acuerdo con la sentencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y con la del Juez de Garantías, Rodolfo Cecenarro, y con la aprobación de la ordenanza antiminera del Concejo Deliberante del mencionado departamento.
Consideran que exponer el caso a nivel nacional podría llegar a frenar "el avasallamiento que sentimos". "Lo único que buscan es la Licencia Social con argumentos falaces, nadie nos explica cómo se repararán los daños en el ambiente, ni cómo se remediarán los impactos del dique de colas que deja la minera”, dice el documento que presentarán al líder Qom, como autoridad nacional.
