Autoridades de la Gobernación de Potosí cerraron ayer tres bocaminas de forma preventiva porque persiste el riesgo de hundimiento en el Cerro Rico después del colapso en la mina Relámpago, que dejó a dos personas atrapadas. También se conformó una comisión para investigar las causas del siniestro.
El secretario de Minería de la Gobernación de Potosí, Elías Choque, informó que la comitiva está compuesta representantes y técnicos de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Federación Departamental de Cooperativas Mineras de Potosí (Fedecomin), la cooperativa Mina Imperial, cooperativa 21 de Diciembre y la cooperativa Compotosí, esta última a cargo de la mina donde ocurrió el incidente el pasado miércoles.
Según Choque, los especialistas determinarán las causas del hundimiento en la cota 4.400, así como a los responsables del hecho. Del mismo modo, contribuirán en las tareas de búsqueda de dos trabajadores de carga de minerales que fueron sepultados por los escombros al promediar las 16:00 del miércoles. Sin embargo, estimó que existen pocas posibilidades de hallar a los obreros con vida, debido a las características del incidente.
Choque manifestó que “todavía es peligroso acercarse” y que por los diferentes niveles de las bocaminas fueron evacuados los cooperativistas. “Actualmente es peligroso, puede que se produzcan todavía más asentamientos”, añadió.
El pasado miércoles, los hermanos Ever y Willy Choque, de 19 y 23 años, respectivamente, quedaron sepultados por un hundimiento en el Cerro Rico. Hasta el momento, continúa la búsqueda de ambas personas que, hasta el cierre de edición (21:00), continuaban dentro de la mina Relámpago.
Choque manifestó que en una inspección que se realizó ayer, se registraron pequeños hundimientos desde la 1:00 en bocaminas contiguas, por esa razón se inició el proceso de evacuación.
Por su parte, el presidente del Comité Cívico de Potosí, Jonny Llalli, sostuvo que la continua actividad minera de las cooperativas en el Cerro Rico provocó el incidente y, al mismo tiempo, responsabilizó al Gobierno de no tomar medidas para prevenir este tipo de hechos en una de las zonas más críticas del cerro.
“Responsabilizamos al Ministro de Minería, que no ha tenido políticas de preservar el Cerro Rico (…) al margen de que sea patrimonio del Estado, es también centro turístico, símbolo nacional. El Comité Cívico ha estado exigiendo a las autoridades de que se lo pueda preservar”, manifestó.
Llalli señaló que la cota 4.400 es una zona de “riesgo” donde actualmente trabajan 500 mineros. Asimismo, agregó que el Ministerio de Minería no agilizó la reubicación de los mineros de esta región a pesar de que existen constantes derrumbes pero no en la magnitud del que se reportó el miércoles.
Contrariamente, Choque informó que la Gobernación transfirió recursos a Fedecomin para buscar nuevas áreas de trabajos y yacimientos.
En 2014, la Unesco incluyó al Cerro Rico de Potosí en una lista de patrimonio mundial en peligro, debido a la situación de vulnerabilidad y riesgo de colapso por la continua actividad minera.
El Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco visitó el Cerro Rico el pasado 8 de mayo para inspeccionar el lugar y emitir recomendaciones a las autoridades.
El presidente del Comité Cívico de Potosí, Jonny Llalli, aseguró que no recibieron respuesta ante las constantes notas enviadas a diferentes instituciones públicas.