Grupo AGVGSB ROTATIVO MININGgolden arrow
JMB Ingenieria Ambiental - RINFA ENCABEZADOCONOSUR ENCABEZADOPWC LOGO MINING PRESS
Induser ENCABEZADOWICHI TOLEDO ENCABEZADOWEG
CAPMINMANSFIELD MINERA HVELADERO ENCABEZADOKNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADO
OMBU CONFECATJOSEMARIA ENCABEZADOBANCO SC ENCABEZADOSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
FERMA ENCABEZADOERAMET CABECERA
SACDE ENCABEZADOglencore PACHONNEWMONT COVID
RIO TINTO RINCONHIDROAR ENCABEZADOSECCO ENCABEZADO
CRISTIAN COACH ENCABEZADOEXPO SAN JUAN ENCABEZADOBANCO SJ ENCABEZADOPRELAST
ABRASILVER ENCABEZADORUCAPANELEPIROC ENCABEZADO
CERRO VANGUARDIAEXPO LITIO ENCABEZADOLITHIUM SOUTH
ALEPH ENERGY ENCABEZADOMETSO CABECERAEXAR ENCABEZADO
ARCADIUM LITHIUMMilicic ENCABEZADO
MAPAL ENCABEZADODELTA MINING
PIPE GROUP ENCABEZADMINERA SANTA CRUZPAN AMERICAN SILVER
EVENTO LITIO ENCABEZADOCINTER ENCABEZADOVIALES SANTA FE ENCABEZADO MINING
PROYECTOS
Cuenta regresiva para el Nord Stream 2
08/04/2019

Pese a que siguen los enfrentamientos políticos

ENERNEWS/El País

Las obras del gasoducto Nord Stream 2 avanzan en la costa del norte de Alemania y prevén culminar a finales de año, ajenas a la tormenta política que no amaina.

Un puñado de operarios con chaleco reflectante trabaja en el tajo abierto a orillas del mar Báltico. Lo hacen aparentemente ajenos a la batalla política que ha desatado esta maraña de tuberías y válvulas, capaces de agrietar el consenso entre los países de europeos y de levantar una tormenta transatlántica que se resiste a remitir. Esta misma semana, Washington ha vuelto a acusar a Alemania de poner en peligro la seguridad de Occidente con la construcción del Nord Stream 2. Estamos en el extremo más septentrional de Alemania, el lugar elegido para que emerja de las profundidades del mar la gran tubería que transportará miles de millones de metros cúbicos de gas ruso hasta Europa a principios del año que viene.

Tuberías gigantescas negras y válvulas mastodónticas naranjas son apenas la parte más visible, que asoma a la superficie en la costa báltica. Aquí, a su llegada de Rusia, el gas se filtra y se oxigena para eliminar los residuos que pudiera haber acumulado por el camino. Las imágenes que llegan del mar, muestran también una obra superlativa. Una serpiente formada por 1.230 kilómetros de tuberías recubiertas de cemento que se ensamblan en la cubierta de barcos-fábrica y que las van alineando en el mar.

Cuenta atrás para el gas políticamente más explosivo
 

transporte la energía directamente desde Rusia a Alemania, pasando por el Mar Báltico, pero sobre todo sorteando Estonia, Letonia, Lituania, Polonia y Ucrania. Sostienen desde el consorcio que aquí, frente a las costas suecas, casi en la frontera con Polonia es uno de los pocos lugares del norte de Alemania a donde podía arribar el gas. El resto de la costa, detallan, o está protegido o destinado al turismo. Aquí sin embargo ya había un polígono industrial e incluso los restos de una central nuclear obsoleta, de la que todavía se puede ver el sarcófago del reactor, que dejó de funcionar con la caída del muro. No hay apenas, aseguran peligro de terremotos.

Los portavoces se afanan en transmitir que desde el punto de vista técnico, las obras que arrancaron hace un año, marchan sobre ruedas. El problema es otro. El Nord Stream 2 se ha convertido en los últimos meses en una verdadera arma de destrucción diplomática. Tanto Estados Unidos como países europeos, sobre todo del Este, acusan a Alemania de incrementar la dependencia energética europea de Rusia, a quien consideran uno de los mayores instigadores de la desestabilización política europea. El gasoducto se ha convertido en una suerte de termómetro y de símbolo de la desconfianza que estadounidenses y europeos profesan hacia la rusa de Vladímir Putin.

Uno de los principales puntos de fricción tiene que ver con que el gasoducto, al esquivar a Ucrania, país que Rusia invadió en 2014, priva a Kiev de los beneficios que supondría el paso por su territorio, al tiempo que Moscú aumenta su capacidad de utilizar el gas como arma política contra Ucrania sin que Alemania se vea afectada, como ya sucedió en 2006 y en 2009.

En el seno de la UE, la disputa ha conseguido incluso agriar la supuesta luna de miel franco-alemana. Las últimas deliberaciones comunitarias han quedado plasmadas en una enmienda a la legislación europea aprobada en febrero, que supone una victoria pírrica para Alemania. Impone la separación entre el gestor de la infraestructura y el proveedor de la energía, es decir, Gazprom, pero a la vez deja en manos de Alemania las negociaciones con Moscú, lo que salva el proyecto.

La componenda sin embargo, ha contribuido a engordar el malestar contra Berlín, a quien se acusa de actuar por libre al margen de los consensos europeos. En la pasada conferencia de Seguridad de Múnich de febrero, el Nord Stream 2 fue una de los temas omnipresentes en las conversaciones de pasillo de los expertos y políticos asistentes y procedentes de medio mundo. Se repetía la pregunta de sí Berlín estaría midiendo bien el daño político y diplomático autoinfligido, como consecuencia de su acuerdo con Moscú.

Le dedicó especial atención en Múnich al gasoducto de la discordia la canciller, Angela Merkel, en un discurso que fue muy alabado por su férrea defensa del multilateralismo. Merkel criticó a Rusia por la anexión de Crimea, pero también defendió un entendimiento propio de la guerra fría. “Nadie quiere ser totalmente dependiente de Rusia. Pero si incluso importamos gas ruso durante la guerra fría, […]. No entiendo por qué la situación hoy debe ser mucho peor y que no podamos decir que Rusia sigue siendo un socio”, argumentó la canciller.

Los cálculos del consorcio indican que solo el Nord Stream 2 tiene capacidad para transportar gas para suplir al año a 26 millones de hogares europeos. Esta fuente de energía resulta especialmente bienvenida en Alemania, un país que ha optado por el apagón nuclear y que planea también suprimir el carbón en los próximos años. Aún así, el apoyo no es ni mucho menos monolítico entre la clase política alemana, donde se escuchan numerosas voces que cuestionan el proyecto. Entre ellas, la de Norbert Röttgen, presidente de la comisión de Exteriores del Bundestag, y miembro de la CDU de Angela Merkel, quien acusa a Berlín de “ignorar la opinión de la gran mayoría de los Estados Miembros y del Parlamento Europeo. [El de Berlín] no es un comportamiento europeo correcto”, según indicó durante un encuentro con un grupo de periodistas en el Bundestag. Dijo además preocuparle “la manera en la que Rusia ejerce poder político con el gas”.

"Rehén de Rusia"

La tormenta tampoco amaina al otro lado del Atlántico. El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, ha aprovechado esta semana la celebración del 70 aniversario de la OTAN para criticar la contribución militar alemana, que vinculó con el polémico gasoducto. “Alemania tiene que hacer más. No podemos asegurar la defensa de Occidente si nuestros aliados se vuelven dependientes de Rusia”. Y añadió: “Si Alemania insiste en construir el gaseoducto Nord Stream 2, como ha dicho el presidente Trump, esto podría convertir a su economía en rehén de Rusia”.

“Toda la atención se centra en Alemania, pero este gas se va a repartir por toda Europa. Este gas además, siempre va a ser más barato”, defiende el portavoz de la empresa. Más barato también que el gas licuado estadounidense (LNG), para el que Alemania planea construir también terminales en el norte.

Allanar parcialmente el camino al LNG tampoco ha logrado calmar la ira estadounidense. Richard Grenell, y hombre fuerte de Trump en Europa llegó a enviar cartas a las empresas que participan en el proyecto del gasoducto advirtiéndoles de “un riesgo significativo de sanciones”, según publicó la prensa alemana. Gazprom es la propietaria de la infraestructura, pero cerca del 50% de la financiación la proporcionan las alemanas Uniper y Wintershall, la austriaca OMV, la británico-holandesa Shell, y la francesa Engie.

Y mientras en los despachos se cocinan amenazas y represalias, sobre el terreno, cerca de las dunas y el mar espeso del norte, las obras avanzan sin pausa, dispuestas a redibujar, -con o sin el beneplácito de EE UU- el panorama energético en Europa.


Vuelva a HOME


*La información y las opiniones aquí publicados no reflejan necesariamente la línea editorial de Mining Press y EnerNews

KNIGHT PIESOLD DERECHA NOTA GIF 300
Lo más leído
PODER DE CHINA
AGUA Y MINERIA
NOTA MÁS LEIDAs MP GIF
VENEZUELA